Temporales sobre las miradas exhaustivas
Sobre los albores de un mañana
Sobre todos los que no se escondieron tras la ausencia
y supieron ver,
sin el temblor incontrolable de los cuerpos,
Con los ojos redondos el destello
Temporales,
Temporales míos
los tuyos, temporales
con los ojos redondos viendo la llegada inminente,
rompiendo la métrica, el innecesario recuento
temporales donde se esconden los cobardes
los cuales serán atravesados por nuestras miradas
y la condena social será el estigma que no podrán borrar
no podrán mentir sus caras la vergüenza
y estarán llegando y se estarán yendo y pasaran
y el tiempo los olvidara y ellos querrán ocultar sus actos
ocultarlos bajo las alfombras del dinero
y nosotros los atravesaremos
con observatorios
indefinidos
de truenos
con nuestros seres intangibles
con multitudes el latido absoluto
latido testigo, latido acción
y aunque, y por si las dudas
y el porque de sus nefastos mamarrachos
manteniéndose en la clandestinidad de los temporales
Ahí vienen los temporales!
Abran los ojos redondos, ahí vienen
Ahí los temporales, ahí la mentira
Que no escapen los temporales!
